Gabriel González, subdirector de CIGIDEN y académico de la UCN, entrega elementos claves para entender el último desastre provocado por el sorpresivo tsunami volcánico en el archipiélago.
El tsunami que la noche del sábado arrasó con la costa de Indonesia y dejó alrededor de 500 muertos, no se produjo como en otros desastres de origen natural que han impactado ese territorio, tras un terremoto. La causa del sorpresivo tsunami fue la erupción volcánica del Anak Krakatoa, un volcán que en los últimos meses tuvo una creciente actividad y cuya erupción el sábado provocó una columna de cenizas de decenas de kilómetros.
El deslizamiento de rocas y sedimentos volcánicos –de un volcán que está parcialmente bajo el agua–, provocó en el estrecho de Sonda que divide las islas de Java y Sumatra, olas destructivas en Indonesia (ver infografía). “Un territorio extremo desde un punto de vista geológico y demográfico”, asegura Gabriel González, subdirector del Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres, CIGIDEN, y académico de la Universidad Católica del Norte.
De acuerdo al investigador, para entender por qué Indonesia sufre el impacto de un nuevo desastres de origen natural, es preciso conocer por ejemplo, que este archipiélago está sobre tres grandes placas tectónicas, donde se contabilizan 150 volcanes activos, infinidad de fallas sismogénicas y una de las zonas de subducción más largas del planeta (6.800 kilómetros de largo). A esto se suma, indica Gabriel González, que es un país densamente poblado, 230 millones de habitantes.
Cóctel geográfico
“Más que un territorio único, indonesia es un archipiélago con más de 17.000 islas, ubicadas entre el océano Índico y el océano Pacífico. Este cóctel geográfico es una de las claves para entender el enorme nivel de exposición a eventos naturales potencialmente catastróficos de este singular país. Indonesia ha visto las peores catástrofes naturales de los tiempos modernos: la erupción del volcán Krakatoa en 1883 y el terremoto y posterior tsunami del año 2004 con 275.000 víctimas”, sostiene el experto CIGIDEN.
Por otro lado, explica Gabriel González, “el volcán Krakatoa se ubica sobre la zona de subducción formada por la convergencia entre la placa australiana y la placa euroasiática, y a escasos 158 kilómetros de Jakarta, la cuarta ciudad mas poblada del mundo. La erupción de 1883 desató varios tsunamis destructivos, cuyas alturas de ola se estiman en 40 metros, causando la muerte de 36.000 personas”.
Es este mismo volcán que el día 22 de diciembre entró en erupción, derivando en un deslizamiento de tierra submarino que generó el mortal tsunami. “El territorio de Indonesia puede ser definido, desde el punto de vista geológico, como una tierra extrema que está viendo nacer una cordillera similar a la de los Himalayas. La que se formará en unos millones de años más, cuando por convergencia de placas, la gran placa australiana entre en colisión con la parte suroriental de la placa euroasiática. Por ahora, los habitantes de Indonesia deben lidiar y armonizar con esta tierra extrema”, concluye el geólogo Gabriel González.
INFOGRAFÍA: SEBASTIÁN SALDAÑA/CIGIDEN
FOTOGRAFÍA: NURUL HIDAYAT/AP