CodexVerde.com. A partir del análisis del terremoto y posterior tsunami de 2010, un equipo de expertos del Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres, CIGIDEN, demostró que los pronósticos de inundación por tsunami basados sólo en señales sísmicas y/o de variación del terreno (GPS), poseen un alto nivel de incertidumbre. La medición directa de la superficie del mar ayudaría a mejorar la detección temprana y seguimiento de la evolución de las olas.